Sin duda alguna, los mitos y leyendas del llano, al igual que la música y la gastronomía, son una parte muy importante del folclor llanero. Estas creencias se han mantenido en la memoria del pueblo por generaciones. Quizá ya conocerás algunas, pues son las mismas historias que nuestros abuelos contaban y decían haber vivido.
Para conocer más acerca de este tema, te recomendamos el Parque las Malocas, el sitio ideal de villavicencio para aprender sobre estos personajes.
En este emblemático parque, podrás realizar un recorrido acompañado por un guía y ver las esculturas de los personajes más populares de la región. Por ejemplo, podrás conocer acerca de la madre monte, la bola de fuego, Juan Machete, la patasola, el silbón, entre otras.
Vive una gran experiencia cultural en Villavicencio conociendo sobre los mitos y leyendas del Llano.
Bola de fuego
Es uno de los mitos y leyendas del llano más conocidas, que viaja de generación en generación.
En una de sus muchas versiones, se dice que es el espíritu de una mujer que decapitó a su único hijo porque este iba a ser obispo.
La mujer fue condenada por este acto a vagar por la sabana convertida en una bola de fuego, que pierde al caminante solitario. Tiende a aparecer en la semana antes de semana santa.
Se dice que cuando se acerca al caminante, este tiene que maldecirla, y por nada rezarle porque esto la atraerá.
La patasola
La Patasola es una mujer que vive rodeada de culebras, camuflada entre los matorrales en lo más oscuro de la selva.
Una hermosa mujer, casada con un vaquero, la cual fue sorprendida por su esposo al serle infiel con su patrón. Este hombre lleno de celos e ira le dio un machetazo que la dejó sin una pierna.
El alma en pena de esta mujer infiel, vaga por fincas, bosques, valles y llanuras. Ella enamora a los hombres y los cautiva con su mirada, para luego guiarlos hasta el bosque. Allí se transforma en una fiera la cual se lanza sobre su víctima.
La llorona
Según la leyenda, la llorona es el espíritu vagabundo de una mujer. Ella ronda por las cercanías de los ríos buscando algo, algo que ha perdido y jamás encontrará.
Cuenta la historia de una hermosa joven campesina. La campesina, trabajaba en una hacienda, donde fue seducida por un hombre joven de la capital. Cuando se dio cuenta que iba a ser madre se retiró de su trabajo y volvió a su hogar. Allí su familia le reprochaba su error. El día en que ésta dio a luz, pensó que la mejor decisión era arrojar a su recién nacido al río mas profundo. La joven mujer se volvió loca y según cuentan, el arrepentimiento la llevó a vagar buscando por siempre el cadáver de su bebé.
Quienes la han visto, dicen que es una mujer vestida de trapos sucios y rotos. De ojos rojizos, la cual llora de vergüenza y espanta a todo aquel que hace maldades.
El ánima de Santa Helena
Esta es otra de las esculturas de mitos y leyendas del llano que se encuentra en el Parque las Malocas en Villavicencio.
El ánima de Santa Helena, es un poema compuesto por un araucano. Este narra la pelea entre dos hombres que disputan el amor de una catira el día de su cumpleaños número quince.
Un extraño llega a la fiesta y reta a contrapuntear a uno de los músicos. Entre rimas sacan sus armas, el extraño muere de un balazo y de este sale una bala perdida la cual acaba con la vida de la hermosa quinceañera.
Desde aquél día se dice que se ve una figura espantando a los forasteros del Hato de Santa Helena.
Juan Machete
Juan Machete, es la historia de un hombre muy ambicioso que quería ser el más poderoso de la región. Por ello, decidió hacer un pacto con el diablo en el que él entregaba a su mujer y a sus hijos a cambio de mucho dinero, tierras y ganado.
Juan obtuvo lo que quería. Se convirtió en un hombre próspero y más rico de la región. Una madrugada, cuando se disponía a ensillar su caballo, vio un toro negro que no le pertenecía. Pensó que era de algún vecino, así que lo pasó desapercibido y se fue a cumplir con sus labores diarias.
Un día misteriosamente, empezaron a desaparecer sus reses y a disminuir toda su fortuna. Hasta el punto de quedar peor de lo que era en un principio. Arrepentido desapareció en medio de la selva. Se dice que se ve un hombre vomitando fuego, el cual vigila el tesoro que Juan Machete dejó enterrado.
El que quiera desenterrar este tesoro, debe ir al lugar donde se cree que está. Tiene que esperar a que aparezca el ánima de Juan Machete y le propine tres planazos en la espalda. Si la persona queda con vida, puede ser el dueño de toda la riqueza que se encuentra enterrada.
Florentino y el diablo
Es un poema escrito por el venezolano Alberto Arvelo Torrealba. Es considerada la composición más popular de los llanos colombo-venezolanos.
Florentino y el Diablo nos narra el enfrentamiento de Florentino, un hombre valiente, que no conocía el miedo, parrandero, buen jinete y coleador; contra el Diablo.
Cuenta la leyenda, que Florentino fue retado a un contrapunteo por un hombre vestido de negro de pies a cabeza (el Diablo).
El enfrentamiento se da en una noche lluviosa en Santa Inés, acompañado de todos los instrumentos típicos del llano; arpa, cuatro y maracas.
Después de una rima tras otra, Florentino logró mantener al Diablo cantando toda la noche. Cuando el sol empezó a salir, Florentino le respondió con rezos, nombrándole a diferentes vírgenes y santos, saliendo de esta forma el diablo derrotado.